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TRAM ha firmado un convenio de colaboración con la Fundación Altarriba para financiar parte del proyecto Sense Sostre, que cubre las necesidades básicas y sanitarias de los animales de compañía que viven en las calles de Barcelona junto a las personas en situación de sinhogarismo.

Con la aportación económica de TRAM se garantizará la identificación, vacunación, desparasitación, esterilización y atención sanitaria que requieren estos animales por un precio simbólico o de forma gratuita, ya que sus responsables son personas en situación de vulnerabilidad y no tienen estas necesidades básicas garantizadas por organismo alguno.

La Fundación Altarriba ha desarrollado el proyecto del primer centro veterinario solidario para los animales de personas vulnerables y actualmente cuenta con dos centros veterinarios profesionales en los que atender a los animales, además de gestionar un refugio donde pueden acogerlos temporalmente en caso de necesidad o para iniciar el proceso de adopción permanente en caso de defunción de la persona responsable.

Hay que recordar que el invierno es la peor época del año para las personas sin hogar, ya que están expuestas a las bajas temperaturas y los centros que pueden acogerlas por la noche no dejan entrar a sus animales de compañía, una petición que durante años también ha realizado la Fundación Altarriba. Esto hace que muchas personas sin hogar prefieran exponerse a la intemperie, con todo lo que esto supone para su salud y seguridad. Esta es una de las situaciones en las que puede actuar la Fundación.

Los voluntarios de la entidad, además, ofrecen talleres y jornadas en centros cívicos y en la calle para informar sobre los cuidados generales básicos de un animal de compañía y sobre sus servicios solidarios.

TRAM también difundirá el proyecto a través de todos sus canales digitales para llegar a posibles voluntarios y colaboradores de la Fundación Altarriba y sensibilizar sobre la dificultad que tienen las personas sin hogar a la hora de cuidar de su única compañía: sus animales también sin hogar.